Si nuestra intención es que los alumnos sean los protagonistas de su propio aprendizaje, el trabajo basado en proyectos es un aspecto esencial que debemos desarrollar en nuestro programa educativo. Este método consiste en la realización de un proyecto, un trabajo que los estudiantes deben desarrollar de principio a fin pero de una manera mucho más dinámica y marcada por un aprendizaje activo.

 

Aquí os explicamos 5 claves que hacen de este método de aprendizaje una herramienta imprescindible en el ámbito educativo.

 

1. Mayor desarrollo de la comunicación y el trabajo colaborativo

 

Quizás uno de los aspectos que más caracterice este método de enseñanza es el trabajo colaborativo. Esto permite que los alumnos desarrollen capacidades que en una clase de carácter más convencional sería complicado. Aquí deben aprender a explicar y exponer sus ideas de forma clara y congruente de la misma manera que deben de ser capaces de escuchar a sus compañeros hasta llegar a un punto en común por donde comenzar a trabajar. De esta manera facilitamos que la comunicación sea mucho más fluida entre el equipo de trabajo ya que es esencial para el correcto desarrollo del proyecto. El aprendizaje colaborativo les permite exponer sus ideas, discutir sobre ellas y tratar de llegar a una conclusión en un ambiente mucho más cercano al ámbito profesional lo que a su vez les motiva y les anima a continuar trabajando.

 

2. Prepara a los alumnos para enfrentarse a situaciones del mundo real

 

El aprendizaje basado en proyectos permite que los alumnos trabajen enfrentándose a desafíos con una naturaleza más parecida a la del mundo profesional real. Además también es una manera mucho más atractiva de involucrar a los alumnos haciéndoles partícipes de su propia formación desde el minuto uno lo que a su vez favorece que toda la información que van recabando para el desarrollo del proyecto les resulte más sencilla de retener y quede mucho más clara.

 

3. Invita a que los alumnos investiguen, exploren y resuelvan posibles conflictos

 

Como hemos comentando, la atención, el interés y las ganas de aprender se incrementan de manera notable. Con este sencillo método de aprendizaje que además requiere de mayor pensamiento crítico por parte del alumno, se ven obligados a desarrollar nuevas destrezas y habilidades que les permitan solventar problemas de manera rápida y eficaz. Los alumnos parten de la necesidad de saber y eso les motiva a continuar. Esta podría ser una de las grandes bazas del aprendizaje basado en proyectos.

 

4. El profesor pasa a convertirse en un guía

 

Dejamos atrás la idea de profesor convencional para que este pase a convertirse en un guía para los alumnos brindándoles las herramientas y el feedback necesario para que sean ellos los que le den forma al proyecto, lo empiecen, lo desarrollen y sean capaces de concluirlo por sí mismos. En definitiva, se trata de dar mayor autonomía y voz a los estudiantes para que vean que sí que pueden trabajar de forma independiente aprendiendo el mismo contenido que hubiesen trabajando en el aula pero de una forma distinta, mucho más interesante, motivadora y con un marcado carácter emprendedor contando además con la confianza y ayuda del profesor.

 

5. Los alumnos sienten ese proyecto suyo y se involucran todavía más en él

 

Este podría ser uno de los puntos definitivos a la hora de decidir si debemos incorporar esta metodología de aprendizaje en el modelo educativo de nuestro centro escolar. Los proyectos a los que se enfrentan favorecen en gran medida que los alumnos se involucren en ellos haciendo que su participación en clase sea todavía mayor y que tengan mejor disposición a realizar el trabajo ya que supone un mayor reto para ellos pues desde el inicio sienten que están comprometidos con la labor que tienen que desempeñar para sacar el proyecto adelante.

 

El trabajo basado en proyectos es una forma divertida de facilitar el aprendizaje y de atraer a los estudiantes. Permite que los temas se integren a través de las áreas de contenido y promueve la colaboración entre alumnos y profesores alentándolos a ser más creativos e innovadores todo ello a través de unas herramientas que facilitan la aplicación del conocimiento adquirido.